Después de cruzar una puerta en la oficina, Claudia y Michael llegaron a la Tierra. Pero no era la misma que conocía Claudia. Está tenía los colores de los semáforos investidos y el cielo era de color verde. Michael la regaño y le dijo que no luciera como turista. Entonces ella le empezó a preguntar donde estaban y como habían llegado. Él solo te puso en la mano en el rostro (denotando desesperación) y le dijo que prestara atención ya que solo lo diría una vez.
El reino entre mundo es exactamente eso, un lugar que se encuentra unido a distintos universos. No solo se encargan de equilibrar la bondad y maldad en una Tierra, sino en todas las que existen. Así que, de ahora en adelante, no debe sorprenderse por estos cambios tan sencillos. Mejor, debe centrarse en la misión. Y si se retrasa, o se convierte en un lastre, la dejaría atrás. Enojada, pero sin otra opción, Claudia lo siguió.
Mientras llegaban al lugar donde estaba el maestro, repasaron el perfil que les había entregado Lyr: Deck, ese era su nombre, llevaba un par de años acumulando mucho resentimiento y odio, pero no contra otros, sino contra él mismo. De acuerdo con lo que había escrito, Deck se sentía muy culpable porque, a pesar que conocía que uno de sus alumnos estaba sufriendo acoso, no hizo nada para evitarlo. Esto causó que el niño, debido al estrés, cayera en un coma del que aún no despertaba. Y, ahora, la historia se estaba repitiendo, porque otro alumno de la nueva escuela en donde trabajaba, estaba en la misma situación.
Claudia le preguntó a Michael como harían para combatir el resentimiento, y este le respondió que había tres maneras de destruirlo: que el huésped muera, que el huésped lo transfiera a alguien más o, la mejor de todas, que el huésped haga las paces y pueda dejar ir todo. Una vez que analizaran la situación, decidirían como proceder.
Llegaron a la escuela en poco tiempo, y fueron directamente al salón de Deck. Claudia se preguntaba porque podían pasar por cualquier lugar con facilidad sin que nadie los detenga, y Michael, otra vez enojado, le respondió que ya no se podían considerar como seres propios de un lugar, sino que se encontraban en todos los lugares a la vez. Por eso, el ojo humano no los podía detectar de la misma manera en que perciben a las personas. Para simplificar, eran espíritus.
Una vez en el salón, ambos vieron que la situación era peor de lo que pensaban. Deck estaba cubierto totalmente por un aura oscura sin forma. La presión que ejercía en su alrededor era sorprendente. Michael en ese momento, decidió que lo mejor era matarlo. Pero Claudia lo detuvo, no se le hacía justo matar a otra persona nada más por que sí. Pero él le dijo que si no lo detenían, no solo consumiría a Deck, sino también a todos a su alrededor.
Sin embargo, Claudia insistió en que le dejara intentar algo, solo le hizo una pregunta antes, si podían interactuar con el mundo que los rodean. Cuando Michael le dijo que si, puso su plan en acción.
En pocas palabras, preparó toda una situación en donde Deck, a través de un poco de sugestión, tomó la fuerza y confianza suficiente para que, en el momento en que volviera a presenciar el acoso de su alumno, lo defendiera y salvara de sus acosadores para siempre. No los agredió ni nada, sino que los reportó, y, además de la expulsión, debían pasar por un proceso terapéutico obligatorio para cambiar su perspectiva.
Así, Deck pudo hacer las pases consigo mismo y, liberado del arrepentimiento, fue a disculparse con el niño que no pudo ayudar hace años. Así, Claudia le demostró a Michael que podía hacer el trabajo. Este, en cambio, le dijo que el trabajo se acababa de poner más complicado.
Justo después de que Deck saliera del hospital, la gran aura que lo rodeaba salió de su cuerpo y tomo la forma de un gigante. Claudia, sorprendida, le preguntó a Michael que había pasado, pensaba que con curar el origen del resentimiento, ese desaparecería. Él le dijo que si, que desaparece del huésped, pero al salir, toma la forma de un monstruo que empieza a destruir todo el entorno sin ningún tipo de control. Por eso le había dicho que era más fácil matarlo. Pero no había escuchado.
Después de decirle que se resguardara, Michael invocó una espada de dos manos del aire. Por lo que le explicó, es un arma que esta ligada a los recuerdos de los integrantes de la agencia de almas. Con ella, podían llegar al núcleo de los arrepentimientos y destruirlos de una vez por todas. Así, empezó una feroz batalla.
Michael estuvo esquivando los ataques del gigante con una velocidad sobrehumana, pero sus defensas eran muy fuertes, por lo que no le era sencillo llegar al núcleo. Claudia, por su parte, estaba aterrada. Pensaba que había conseguido realizar una buena acción por primera vez, para solo volver a equivocarse... ¿Eh? ¿Volver a equivocarse?
Al hacer consciente esos pensamientos, volvió a tener un gran dolor de cabeza y regresó uno de sus recuerdos: ella en un campo de tiro profesional, manejando dos pistolas, una en cada mano. Y una persona que la felicitaba por el buen trabajo que había hecho, para luego cambiar a esa misma persona en el suelo sin vida.
Luego de un grito desgarrador, Claudia observó sus manos y vio que tenía las pistolas de su recuerdo. Armada de valor, se lanzó contra el gigante.
Sus armas eran altamente efectivas contra la defensa del monstruo, a lo mejor por su mayor potencia a comparación de una espada. Trabajando en equipo, lograron llegar al núcleo del gigante y destruirlo.
Luego de recuperar sus fuerzas, Michael le agradeció la ayuda a Claudia y le dijo que no era tan mala, pero tenía mucho que aprender. Terminado el trabajo, y viendo que podía llegar a recuperar sus recuerdos, regresaron a la oficina para reportarle a Lyr su misión exitosa.
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