Que mejor que terminar en las publicaciones nocturnas con una de las historias de horror, fantasía y misterio de uno de los maestros modernos del género.
Locke & Key-Bienvenidos a Lovecraft es el primer arco argumental (de seis) de la serie Locke & Key escrita por Joe Hill (hijo de Stephen King), con el arte de Gabriel Rodríguez (su compañero en el crimen habitual) y colores de Jay Fotos. Originalmente publicado en 2008, el primer arco se compone de seis números. En México se ha publicado en dos ocasiones: en siete grapas (el último número inexplicablemente fue dividido en dos) por la ahora extinta Editorial Bruguera y en un tomo recopilatorio de pasta dura por Panini Comics México. Cuenta con una adaptación live-action realizada por Netflix, aunque mezcla elementos de todos los arcos.
La familia Locke, compuesta por la madre Nina, el hijo mayor Tyler, la hija intermedia Kinsey y el hijo menor Bode, se ve obligada a mudarse al pueblo de Lovecraft a la antigua casa familiar, la Casa Llave, después del brutal asesinato de la cabeza de familia, Rendell Locke, a manos de un compañero de clase de Tyler. Siendo los nuevos del pueblo, intentaran empezar de cero para superar la tragedia junto con el hermano de su padre. Pero no podrán. La Casa Llave tiene muchos secretos, secretos que protegía su padre. Y ahora será el turno de Tyler, Kinsey y Bode protegerlos de las fuerzas malignas que buscan destruir el mundo.
La primera vez que la leí (en la biblioteca se encuentran tanto las grapas de Bruguera como el tomo de Panini) me voló la cabeza. Con el primer número, Joe Hill supo construir un mundo lleno de fantasía (creo que le podemos llamar fantasía oscura) y horrar impresionante. No soy muy fan de lo que sería el género del horror, pero en su momento vi muy buenas críticas a la serie y le di una oportunidad. No me arrepiento.
Igual que las historias de misterio, no quiero dar muchos detalles al respecto. Por lo que me centraré en el análisis de los personajes, los cuáles son un punto muy fuerte de la historia, ya que nuestros protagonistas se encuentran en duelo por la pérdida de su padre, una situación con la que varios que hemos perdido seres queridos nos podemos conectar y empatizar con ellos.
Tyler siente mucha culpa por todo lo acontecido, siente que el fue el responsable indirecto de la muerte de su padre al estar pasando mucho tiempo con su compañero de clases Sam Lesser, el asesino. Esta culpa lo lleva a ser alguien que siempre esta enojado y encerrado en si mismo, alejando a las personas que se encuentran a su alrededor.
Kinsey, mientras tanto, esta peleando una batalla diferente: una contra ella misma. Sobrevivió al ataque escondiéndose junto con su hermano Bode, pero, a consecuencia, se esta perdiendo a si misma. Siempre pensó que era alguien valiente. Esto le demostró que no es así, se quedo asustada escondida para continuar viva, no se reconoce en el espejo, no sabe quien es.
Bode se vio afectado más que nada al extrañar mucho a su padre. Y es esa tristeza lo que le permite ser el primero en descubrir el secreto de la Casa Llave. Su corta edad le permite estar más abierto a las posibilidades y a la magia, a diferencia de sus hermanos mayores. Solo que es esta misma condición lo que lo pone en un punto donde puede ser manipulado con mayor facilidad, y más en el estado de tristeza que se encuentra.
Incluso el personaje de Sam Lesser, el culpable de poner todo en movimiento, tiene su momento para explicar su trasfondo y motivaciones para hacer lo que hizo. Este es un punto muy a favor de esta historia, todos los personajes son explorados desde distintos ángulos dándoles una personalidad tridimensional y haciéndolos más humanos.
El trabajo de Gabriel Rodríguez es majestuoso. La historia no estaría completa si no fuera por su arte. Es el complemento perfecto para Joe Hill. La historia de por si da algo de repelús, pero si solo fuera el texto plano, lo podría dejar pasar por una emoción pasajera. El dibujo de los acontecimientos es lo que más me hizo sentir preocupación por los protagonistas. Más de una ocasión me hizo sentir "esto no va a terminar bien". Fue lo que más se me quedo guardado en la cabeza cuando pienso en esta historia. Incluso al momento de escribir esta entrada la piel se me pone "chinita".
Si son fanáticos de la fantasía oscura, el horror y el misterio, aquí se conjuntan de una manera magistral como solo Joe Hill y Gabriel Rodríguez lo saben hacer. Y, siendo sinceros, la adaptación live-action de Netflix no le hace la justicia necesaria a esta gran obra.
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