Lo que no sabía el prefecto, y que fue su más grande error, es que Claire había entrenado mucho en defensa personal. Así que el golpe lo pudo esquivar y darle una patada al prefecto.
- Jajaja - dijo el prefecto - eres fuerte
- Gracias - dijo Claire con una gran y linda sonrisa
-Pero no lo suficiente para vencerme
El prefecto volvió a arremeter contra Claire. Sus ataques eran rápidos y muy fuertes. Claire los logró esquivar casi todos. En un descuido, el prefecto lanzó una patada a la cabeza de Claire. Pero en ese momento, me puse en su camino y la detuve.
- Claire no es la única que sabe defenderse - sentencié
Claire y yo empezamos el contrataque. Nuestros golpes venían de todos lados y el prefecto no podía detenerlos todos, ni siquiera tenia oportunidad de golpearnos. Le dimos varios en los costados, en el pecho y en las piernas, pero aún no se daba por vencido, solo se estaba cansando.
- Esto es más divertido de lo que pensé
- Rindete, no puedes vencernos - le dije
- No, pero puedo usar la información que sé para escapar
- ¿Y que podrías saber tú? - le preguntó Claire
- Todo, se todo sobre sus planes, sus investigaciones secretas, su pasado...
- No te creemos, es imposible que...- empezó a decir Claire
- ¿Dónde está esa información? - pregunté
- ¡¿En serio le crees?!- me gritó Claire
- No, pero no podemos arriesgarnos. Nuestras conversaciones e historias son muy delicadas, sería catastrófico que cayeran en malas manos
- Veo que lo entiendes - dijo el prefecto - acompáñenme a la puerta principal y les daré la información
- Lo haremos, pero tienes que prometer que no volverás a extorsionar a ninguno de los maestros de esta escuela, si no, te volveremos a buscar para terminar con esto de una vez por todas
- Jajaja, tu si que sabes negociar muchacho. Esta bien, te lo prometo. No me meto en tus asuntos y tu no te metes en los míos. ¿Trato?
- Trato - respondí
Claire y yo lo acompañamos a la puerta principal sin decir ni una palabra.
- Que obedientes son - nos dijo el prefecto y sacó un paquete - tengan, soy un hombre de palabra. Aquí está toda la información de ustedes y de los maestros de la escuela.
- Gracias - dije - ahora, vete, y no quiero volver a saber nada de ti
- Jajaja, creeme, siempre estaré en la sombra, acechando - dicho esto se echó a correr
Claire abrió el paquete y dentro había papeles, grabaciones, fotos, todo. Y el prefecto decía la verdad, había información de nosotros dentro.
- Quememos esto después - dijo Claire - mientras, regresemos a clase. ¡No quiero tener más faltas!
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