Reseña de Judas (cómic)

Hoy, en miércoles de cómics, toca el turno de algo independiente que compré recientemente. 

Judas es una serie limitada de 4 números publicada originalmente en inglés por BOOM! Studios en 2018. Es escrita por Jeff Loveness y dibujada por Jakub Rebelka. En México, fue publicada en un formato pasta dura por Panini Comics México.

El cómic nos presenta a Judas después de que cumplió su función de traicionar a Jesús en los Evangelios. Ha descendido a los infiernos y se encuentra con Lucifer. Pero no es el único que descenderá. Tendrá un encuentro que cambiará la historia de la humanidad para siempre.

La premisa es muy simple: presentarnos la historia de Judas y Jesús después de sus respectivas muertes. No solo eso, nos muestra un poco del pasado desconocido de Judas, desde su infancia hasta que se encuentra con Jesús. Pero no lo hace para adoctrinarnos ni enseñarnos religión. Sino que en su centro es una historia sobre el perdón. Que las decisiones que tomas te definen, pero no totalmente. Siempre hay una oportunidad de cambiar y no convertirte en lo que dicen que eres, sino en alguien mejor. 

Toma las bases que establece la Biblia y construye sobre eso para contar una historia relacionada con el amor y el perdón que tanto se profesa en la misma. No por ello busca adoctrinar, es solo una interpretación de lo que pudo haber sucedido. Pero mantiene su trasfondo y mensaje religioso.

El dibujo y color de Jakub Rebelka es majestuoso. Muy adecuado para pintar escenas bíblicas, además, transmite que la historia contada es épica, algo que no se va a volver a ver en mucho tiempo, un evento único. Su estilo es perfecto para una Biblia ilustrada. Los colores que usan pasan de ser muy fríos a ser muy cálidos, de desesperación a esperanza, representan a la perfección la emoción de la escena. 

Desde que Panini Comics México se atrevió a publicar esta obra, tenía curiosidad por leerla. No me decepciono en ningún momento. No puedo recomendarla lo suficiente. Además, es muy corta, se lee muy rápido pero te deja pensando en una cuestión importante: ¿podría ser Judas un personaje malentendido?