Un joven de nombre Yair tenia una vida monótona nada interesante le pasaba a él. Todos los demás tenían aventuras pero él no.
Un día se decidió escapar de casa pero lo descubrieron antes de que terminara de cruzar su jardín. Otro día planeo una gran fiesta en su casa, pero nadie asistió por estar en otra fiesta; cuando quiso ir para allá, le cayó encima una gran lluvia que no le permitió moverse de su casa.
Como ven, tenía muy mala suerte. Decidió contrarrestarla Intento todo lo que estaba a su alcance herraduras, tréboles de 4 hojas, evitar las escaleras, los gatos negros, la sal, etc.; pero no le resultaba nada.
Hasta que pensó en ir a visitar a una vidente para que lo instruyera en lo que tenía que hacer. Al hacerlo, descubrió que su vida pudo ir de mal en peor si hubiera tenido buena suerte. Por lo que desde entonces no renegó más de su suerte y se concentro en vivir su vida.
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