Gracias a un reto (por el cual les traeré contenido diferente con respecto a los libros) con una muy buena amiga mía, he podido leer esta historia a la que nunca le había dado la oportunidad. Y por lo tanto se las presentó a ustedes:
Escrito por Laini Taylor, fue publicado en español en 2012 por la editorial Alfaguara. Es el primer libro de una trilogía del mismo nombre.
La historia sigue a Kaoru, una joven de 17 años que estudia arte en Praga junto a su mejor amiga Zuzana, pero esto no es lo único que hace. De vez en cuando hace encargos para Brimstone, una quimera (mitad humano, mitad animal) y su padre adoptivo, viajando a varias partes del mundo recolectando dientes sin saber exactamente para que los utiliza. En uno de esos viajes ve que la puerta por la que accede a ver a Brimstone esta marcada con una mano, ese el comienzo de los problemas. La culminación de una guerra que se lleva peleando desde hace varios años y en la que Karou esta involucrada sin siquiera saberlo.
A primera vista puede parecer una típica historia de magia, romance, aventura, pero no lo es. Me arrepiento de no haberla empezado a leer antes. La historia esta muy bien construida y desarrollada, tiene una fluidez en la cual te deja la sensación de querer seguir leyendo. Las descripciones de las ciudades se sienten muy reales, te transportan al mismo lugar donde sucede la historia con mucho detalle sin cansar en sus explicaciones.
Lo mejor de este libro (además de las descripciones) son los personajes. La construcción del personaje de Karou es consistente a lo largo de todo el libro. Al principio de la novela nos muestran como es la vida ordinaria de Karou para, poco a poco, introducirnos al mundo extraordinario en el que también vive. Los conflictos que tiene sobre su identidad y pasado y el por que es la hija adoptiva de una quimera están presentes y se van resolviendo algunos durante la historia. Es un personaje carismático con el que identificarse al sentirse constantemente fuera de lugar, como si perteneciera a otro lugar. Sus valores e ideales están bien definidos y buscara ayudar a su familia de quimeras a cómo de lugar.
Al lado contrario tenemos a Akiva, un serafín. El principal conflicto que presenta este personaje es la atracción a Karou, ya que es su enemiga. Ese conflicto está presente desde el primer momento en que se encuentran y hasta el final de la historia cuando descubre quien es Karou (cosa que no diré aquí para no arruinar la sorpresa). Es un personaje que hace lo que le ordenan porque asi fue adoctrinado, por lo que el conflicto de hacer algo diferente a lo normal es un rasgo con el cual se pueden identificar también los lectores. Además, la relación amor-odio que tiene con Karou es a la vez cómica como dramática por la situación en la que se encuentran.
En fin, es un libro que aunque pueda parecer uno más del conjunto de novelas juveniles, no lo es, destaca sobre el resto. Muy recomendable. Próximamente traeré los siguientes dos libros de la serie.
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